Denunciar las prácticas antidemocráticas que tienen lugar en el ciberespacio venezolano y visibilizar proyectos e iniciativas que buscan generar soluciones a este problema; así como también crear redes de apoyo para futuras colaboraciones que puedan derivar en investigaciones, publicaciones, pronunciamientos o campañas de incidencia a nivel nacional, regional o global.

El problema de la desinformación en Venezuela está potenciado por otros factores muy específicos que impiden que los ciudadanos puedan acceder a fuentes de información confiables. Ante este escenario, las discusiones deben abordar este problema de forma integral, analizando tanto los actores que generan y promueven la difusión de noticias falsas, como aquellos que bloquean el acceso a sitios web informativos o ayudan a posicionar tendencias en redes sociales de forma artificial.

Los panelistas estarán preparados para hacer la sesión más o menos participativa e interactiva dependiendo del número de participantes que estén presentes en la sesión.

Se ofrecerá a los participantes distintos canales de comunicación para mantener el contacto y continuar la discusión posterior al evento. El principal objetivo sería generar un pronunciamiento, publicación o investigación relacionado al tema de la sesión y que integre a otros actores en los meses siguientes.